El actor estadounidense Sylvester Stallone dijo ayer en Madrid que la película John Rambo, con la que pone punto y final a sus luchas contra el mal, "es violenta porque el mundo es violento".
Stallone posó para los numerosos medios de comunicación que se dieron cita sobre el césped del Santiago Bernabéu, estadio donde juega habitualmente el Real Madrid, convertido ayer en el escenario de la presentación española de la cuarta entrega de Rambo.
"La película es violenta porque el mundo es violento, y yo no voy a esconderlo", afirmó Stallone, quien añadió que el tono "cruel y realista" del filme está buscado "muy" a propósito.
"Quería hacer dinero, pero a la vez crear algo duro y difícil, alejado del gran cine comercial que se está haciendo en Hollywood", explicó el actor, que además dirige y produce la película.
Stallone confesó que no le importan las críticas negativas por las escenas de violencia gratuita del filme si ello "contribuye a denunciar esos conflictos de los que nunca se habla, pero que sufren miles de personas a diario, como es el caso de Somalia, Kenia, Irak o la propia Birmania".
La película, que llega dos años después de la sexta entrega de otro de sus míticos "alter ego", Rocky Balboa, lleva recaudados cerca de 20 millones de dólares en E.U. desde su estreno el pasado fin de semana y es ya la segunda más vista.
"Los jóvenes de ahora no saben muy bien quién era Rambo y lo van a ver con curiosidad, como si se tratase de un nuevo animal capturado en la selva", explicó Stallone.
El actor reiteró su apoyo al republicano John McCain como candidato a la Casa Blanca, ya que "como antiguo senador conoce los entresijos de la política, como ex militar luchó en Vietnam y, además, ha vivido muchos años en Arizona y conoce bien los problemas de la inmigración".
Sin embargo quiso dejar claro que Rambo es "neutral" y que se siente "algo incómodo" con la fama de republicano que el presidente Ronald Reagan le dio al personaje a finales de los 80.
Stallone negó que él mismo vaya a presentarse como candidato en algún Estado, como ya hizo por California su "amigo y enemigo" Arnold Schwarzenegger, a quien definió como "un animal político" que llegará, "si lo hace bien, a ser presidente del país".
"Yo no sirvo para eso, a mí me gusta pasear y estar en casa con mis hijas y con mi perro", concluyó el actor.
Publication: El Tiempo - El Tiempo Nacional
Provider: Casa Editorial El Tiempo
Date: January 29, 2008
viernes, febrero 01, 2008
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